Ayer entré a un chat de BDSM que frecuento durante unos minutos y en el transcurso de esos minutos pude leer que alguien comentaba que conocía a bastantes sumisas que se habían pasado a Amas y que habían sacado la mala leche que tenían dentro. Leí esa sentencia y cerré el chat pensando que los tópicos pueden ser bastante perjudiciales.
Imagino que es una forma de hablar sin mayor trascendencia que una conversación entre amigos pero si hubiera alguna persona que se estuviera iniciando en el BDSM y lee eso podría llevarse la impresión de que las Dóminas usamos el BDSM para descargar nuestra bilis, nuestro rencor o nuestro odio hacia la persona que estamos sometiendo y, la verdad, no me gusta nada esa imagen de Dómina, ni me gusta esta imagen de mujer.
Si Yo estoy de mala leche porque puedo estarlo, como todo el mundo, ni voy a sesionar ni voy a jugar de ninguna forma.
Una de las primeras normas básicas en el BDSM es que el Dominante debe autocontrolarse. No debe perder el control y debe estar atento a la persona a la que está sometiendo para valorar el estado de malestar o bienestar de las prácticas que está llevando a cabo. Eso lo leemos repetidas veces en los blogs y textos de BDSM, ¿y qué pasa con las Dóminas? ¿es que nosotras podemos sesionar cargadas de mala leche? Pues no. Y, es más, ¿alguien en sus cabales permitiría que una Dómina o un Dominante o un Ama/-o le sesionara si no confiara en que se encuentra en pleno uso de sus facultades mentales y que está sereno? Yo no lo haría, desde luego. La responsabilidad es compartida, por mucho que el Dominante lleve las riendas.
Si no estás seguro/-a de que el Dominante está sereno antes de una sesión, ¿de verdad estarías dispuesto a ponerte en sus manos? Y por sereno también hago referencia a alcohol y drogas que aturden la percepción. Por favor, seamos responsables.
¿Se han planteado alguna vez por qué las Dóminas parece que necesitamos una pose de mala leche para Dominar? ¿Realmente creen que nos hace falta? Esta idea de la mala leche y el gesto duro viene de la fantasía y del imaginario fundamentalmente masculino. Por este motivo la industria del porno (no olvidemos que, aunque esté subiendo el porcentaje de mujeres que ven porno, básicamente los grandes consumidores han sido siempre los varones) nos nutre de imágenes de Dóminas como mujeres duras, algunas extremadamente sádicas, y sin ningún tipo de piedad mientras que el sumiso «soporta» todo tipo de vejaciones, azotes, medical, calambrazos, etc. Si las personas adultas en sus cabales sabemos que la industria del porno es justo eso, una industria, y que la grabación de las secuencias se trata de una interpretación que puede durar horas, que las tomas se pueden repetir una y otra vez y que puede ser que se esté fingiendo… ¿acaso las pelis o secuencias FemDom no se basan en la misma estrategia de marketing? ¿Por qué nos creemos que ese modelo es, por tanto, el bueno? Que un chico o un adolescente crea que eso es verdad puedo entenderlo pero que lo crea un adulto es preocupante.
Del mismo modo, la inmensa mayoría de las páginas webs, textos, relatos, etc. del ámbito ginárquico son escritos y mantenidos por hombres. Y este ámbito sí sostiene y mantiene a la mujer sin piedad que busca tener al hombre siempre sometido y siempre por debajo. Pero no deja de ser una imagen que busca alimentar el morbo de hombres que necesitan de eso. No tengo mucho más que decir que si este ámbito es consensuado y aceptado por todas las partes merece todo el respeto, aunque no lo comparta.
Claro que al estar tan extendida esta imagen, que se crea que todas nosotras debemos corresponder a ese papel para que seamos reconocidas como Dóminas, es un error. Hablo de reconocimiento por el sumiso. Como tengamos que estar atentas a un modelo exterior la llevamos clara porque es probable que no tengamos ni esos cuerpos, ni esos calabozos, ni esos instrumentos. Puede ser que no dispongamos de ese atrezzo, ni ese cuero o látex. Y no por eso dejamos de sentir que somos mujeres que deseamos Dominar. Porque ser Dómina es un sentimiento, una necesidad más allá de lo que la sociedad nos quiera imponer. Si estamos en el BDSM es porque deseamos desarrollar nuestra sexualidad en libertad, entonces ¿por qué vamos a permitir tener que amoldarnos a otros modelos si no corresponden con nuestra imagen interior? Tampoco todas pretendemos ser profesionales ni necesitamos dar ninguna imagen cara a la galería ¿por eso no merecemos la tranquilidad de vivir nuestra sexualidad como nos plazca? Puedo ser una mujer dulce, amable y sensible y tratar a mi sumiso con ternura pero tengo el control y la autoridad, ¿soy por eso menos Dómina? No. Cada mujer es como es.
Por otra parte, me parece cuanto menos preocupante que dentro del BDSM haya personas que no se hayan planteado que la mujer pueda ser Dominante por naturaleza y no porque esté pasando por una mala racha y tenga que descargar la mala leche en alguien. Me da a mí la sensación que, quizás, sea la manifestación de uno de tantos prejuicios como debemos soportar en ocasiones las mujeres Dominantes. Yo no necesito la mala leche para Dominar, es más, cuando sesiono me siento contenta, expectante, deseo estimular y sentir estímulo. Deseo hacer sentir a mi sumiso, hacerle sentir muchas cosas, no sólo dolor, no sólo sufrimiento, porque a veces no hay nada de eso en una sesión. No siento la necesidad de ponerme borde para ser obedecida. No tengo que dar voces ni insultar.
El sumiso me obedece no porque sienta miedo de mí, por favor, esto es BDSM. El sumiso obedece porque me respeta y me admira. Porque cumplo su fantasía y su sueño. Porque respeto los acuerdos y asumo un consenso. Porque me desea. El sumiso debe aceptarme como soy y si él desea una Dómina dura y borde deberá buscar a otra mujer porque Yo puedo serlo pero no siempre me apetece. Y, seamos claros, para mí esto no es un trabajo, Yo no hago un papel, Yo no actúo.
Para algunas personas en su fantasía o en su deseo tienen la imagen de que la Dominante únicamente busca hacer sufrir, pues ¡vaya rollo! Con sinceridad, a la mayoría lo que nos gusta es SORPRENDER básicamente y lo escribo con mayúsculas. Y pasárnoslo bien. De ahí que no es raro que me ría si me hace gracia algo y haga reír también a mi sumiso, incluso en sesión. ¿Por eso soy peor Ama? Eso opinión queda a vuestro criterio aunque sólo pueda juzgarme mi sumiso. Yo prefiero ser como soy y no tener que vivir una vida que me sea ajena. No quiero ser un papel ni una impostura.
Soy ScheherezadeDom y me gusta disfrutar siendo Ama.
Muy buenos días ScheherezadeDom. Antes que nada encantada de volver a leerte y compartir tus puntos de vista aportando nuestro granito de arena.
En cuanto a lo que afirmas pienso que las que vivimos una RELACIÓN Femdom sabemos que ésta se basa en el amor, el cariño, el respeto y la admiración mutua dentro de la posición que cada uno adoptamos y tenemos dentro de ella, y que nos aporta una forma de vivir plena, satisfactoria y feliz. Por tanto no cabe esa “mala leche” de la que hablas. Dominar a nuestro sumiso nos ha de reportar satisfacción y regocijo tanto a él como a Nosotras. En la relación Femdom lo que se da es un acto de amor por lo que no cabe el ensañamiento ni la pérdida del control ya que de ser así la confianza y el respeto mutuo se perdería por completo.
Creo llevas mucha razón con que esa “mala leche”, ese gesto abrupto y despiadado, es la imagen con la que se asocia el Femdom, propia de una industria cuyo objetivo es vender y ganar dinero, pero nada más lejos de la realidad.
Comparto el hecho de que se domina con el control, la obediencia y como no también con una sonrisa y un gesto dulce y cariñoso. Mi sumiso lo es porque me ama por encima de todo, me admira y se ha entregado a mí libremente para ensalzarme como mujer proporcionándome una vida feliz y gozosa. Yo disfruto y me siento plena dominándole, sabiendo que me pertenece y es mío; él disfruta con mi control y dominio, lo necesita y yo se lo proporciono gustosamente.
En una relación Femdom el sumiso no puede pretender que su Ama sea tal y como él desea (para eso están las profesionales que dan y cumplen con lo deseado y exigido por el cliente) ya que estaríamos cambiando los roles (el Ama pasaría a ser sumisa, obediente y complaciente del sumiso/Amo). El sumiso acepta a su Ama tal y como es, con sus formas, su carácter y personalidad reforzando y procurando con su actitud y entrega que sea Ella misma siempre.
Por último quiero decir muy alto que esta relación D/s que mantengo con mi sumiso y marido nos enriquece a ambos día a día ya que hemos alcanzado un nivel de comunicación, entendimiento y felicidad que jamás pensamos que pudiéramos vivirlo.
Ah, y que no nos estancamos ni la monotonía tiene lugar entre nosotros. Cada día avanzamos en ella sorprendiéndonos ambos de lo llegamos a sentir el uno por el otro.
Gracias y un abrazo muy afectuoso.
SEÑORA
Delicioso como siempre.
Acabo de leer este blog. Me ha dejado sin palabras, un poco mas y me vienes ganas de llorar. Comparto todo el articulo del blog al completo.Todos los comentarios son tambien extraordinarios.
Aprovecho en este ya 3 comentario para presentarme. Soy hombre, sumiso, de Catalunya, paso de los 50 años. Un dia aterrice aqui y aqui me quedo, no me voy. Es un encanto leer articulos y comentarios como el que hoy he leido. Gracias a todos, este blog debe de seguir y seguir.
Siempre a sus pies, SEÑORA.
Siempre tan oportuna en sus escritos y siempre tan acertada. Parece que esa imagen ni considera ni tiene en cuenta a las parejas FemDom. Como si las Amas tuviéramos que andar solas sin nadie que nos soporte, porque al final esa es la idea ¿no? Quién va a aguantar a alguien que destila mala leche todo el día. En fin. Saludos y mis respetos.
Scheherezade Dom
Olé olé y olé.
Suscribo cada una de sus palabras, Señora.
Hay demasiado estereotipo en la sociedad, y el ámbito BDSM no se libra de esas etiquetas tan artificiales que intentan colgarnos.
Sin ir más lejos, soy sumiso, y por tanto debería ser un arrastrado sin personalidad ni otra misión en la vida que obedecer porque está en el guión.
Nada más lejos de la realidad. Disfruto sirviendo a quien respeto y a quien deseo servir…no me ofrezco a cualquiera, porque tengo un valor cómo sumiso que he ido consiguiendo a lo largo de los años. No es un don
Gracias como siempre por su clarividencia y clase diciendo las cosas como son (o al menos, como yo las interpreto)
Quedo a sus pies,
pedro
Gracias a ti por ser como eres y por tomarte el tiempo de dejarme el comentario. El sumiso no es arrastrado ni está para sufrir la mala leche de nadie. Se merece un respeto y merece ser valorado. El resto, solo es marketing
Buenas tardes , Señora
Es de agradecer ese intento de cambiar el concepto que la sociedad tiene sobre el BDSM.
El estereotipo de la Dominante con cara de pocos amigos que va dando fustazos a diestro y siniestro , es quizás el más habitual en los medios . Lo que los medios nunca explican es que esa escena es una escena puntual de una práctica puntual en este mar de prácticas .
Una cosa es ser sumiso y otra cosa es ser masoquista. Parece que todo sumiso es un masoquista para cualquier profano .
No se debe concebir la vida sin humor . Creo que es más divertido escuchar reír a la Dominante . Alguien dijo que cuando la Dómina ríe , ya es demasiado tarde. Esa risa introduce ese factor sorpresa tan necesario en una sesión ( aunque algunos puristas se toman esto con la seriedad de una sesión de espiritismo)
Que cada cual celebre sus sesiones como le parezca: con solemnidad , o con cierta informalidad ; pero la alegría mejora la vida .
Por cierto, igual que el/ la Dominante no puede descargar su ira en una sesión , un sumiso también debería asistir con su cabeza más o menos despejada . Con la mente limpia mejora la sesión
Gracias por el debate, Señora
Me ha divertido mucho tu comparación con una sesión de espiritismo. Me encanta.
Te doy la razón, cuando me río se echan a temblar…
Me encanta tu intervención. Gracias
Scheherezade Dom
Los sumisos obedecemos porque somos felices obedeciendo a nuestras Amas. Y Ellas son felices con nuestra obediencia y nuestra dedicación. No existe mala leche ni rencores. Sólo somos felices, nosotros sirviendo y Ellas siendo atendidas como se merecen.
Un gusto visitar este blog. Un saludo desde Argentina de parte de mi Ama Mistress Roxy
cheshire cat de Mistress Roxy
Igual de feliz que me hace leer tu comentario. Conozco el blog de tu Ama, es excepcional. Me honra con ese saludo. Gracias por tomarte el tiempo de escribirme y transmítele, por favor, mi saludo a tu Ama, y mis respetos.
Scheherezade Dom
Es recurrente el echar mano de tópicos, respaldados por prejuicios, para tratar de ocultar la ignorancia. Tomar como propias las opiniones del colectivo social parece resultar útil y sobre todo, funciona como mampara protectora de uno mismo.
Si esto precede a lo que habría de ser el desmonte del tópico, al menos no se habrían derrochado energías en balde, pues quiere decir que la persona, al final, va a evolucionar en positivo, y va a irse desprendiendo del tópico facilón,basado en juicios, miedos e inseguridades.
Las Dóminas son mujeres con un halo de enigma y de morbo, de misterio, así como de innegable poder. ¿Interesan mujeres así en medio de la sociedad? ¿Pueden resultar, inclusive, molestas para según qué perfiles o mentalidades? Las mujeres sumisas, como polo opuesto, también estamos dentro del misterio y de lo prohibido, pero con un poder muy diferente, entregado casi siempre, y velado en algunas ocasiones; los tópicos también engloban a las partes sumisas como manipulables , e incluso no demasiado inteligentes por elegir lo que elegimos.
En fin, que dejando tópicazos a un lado, no nos queda otra que vivir nuestras propias realidades, cada cual en su halo propio, y tratando de ser lo más feliz posible en la realización personal.
Exacto. Hay que escuchar el deseo de uno, dejarle tiempo. Tomarlo con tranquilidad y sentirse. A partir de ahí ya puedes huir de tópicos porque conoces tu deseo, qué te mueve y qué persigues. No hace falta encasillarse en una imagen para ser, ni para disfrutar. Lo que hace falta es conocerse.
Gracias por tus inteligentes comentarios. Un placer leerte.
Scheherezade Dom
Acabo de leer este blog. Me ha dejado sin palabras, un poco mas y me vienes ganas de llorar. Comparto todo el articulo del blog al completo.Todos los comentarios son tambien extraordinarios.
Aprovecho en este ya 3 comentario para presentarme. Soy hombre, sumiso, de Catalunya, paso de los 50 años. Un dia aterrice aqui y aqui me quedo, no me voy. Es un encanto leer articulos y comentarios como el que hoy he leido. Gracias a todos, este blog debe de seguir y seguir.
Siempre a sus pies, SEÑORA.
Bienvenido. Espero que te sientas a gusto.
SEÑORA, Si estoy aqui es porque me siento a gusto. Muchas gracias por la bienvenida. Ud. me ha ayudado mucho leyendo sus blogs. Siempre ha sido un encanto leer sus blogs pero este ultimo ha sido enternecedor, inesperado. Cuanta razon tiene!!!
De nuevo, siempre a sus pies, porque esto no cansa nunca.
DEEP BLUE
me encanta su pagina señora,descubri mi sumision hace poco y espero conocer una AMA algun dia.
Gracias
saludos.me gusta mucho esta pagina ya que soy un sumiso con apenas tres años y leo mucho sobre el femdom…espero encontral algun dia una AMA para poder servir…este estilo de vida es maravillozo.
Buenas.
Esa visión de que la Ama es una mujer de mala leche, con el carácter agriado, hierática, incapaz de sonreír, como si fuese una oficial de la SS, obedece por supuesto al tópico manido de mujer Dominante del BDSM que muchos se han esforzado por establecer como imagen fidedigna del patrón que debe seguir toda Ama que se precie. Es de hecho, una cosificación de la mujer que tiene sentimientos de dominación. También los sumisos somos objeto de cosificación, ojo.
Particularmente, a mí no me atrae en absoluto ese tipo de mujer, y creo que aquí además se confunde la velocidad con el tocino. Una mujer puede tener un temperamento altivo y dominante (no en el sentido de orientación sexual) y sin embargo aborrecer este tipo de relaciones afectivas y/o sexuales. Por el contrario, una mujer puede ser extremadamente amigable, cercana y humilde, y tener profundos sentimientos y necesidades de dominar.
No me gustan nada las señoritas Rottenmeier. Y no me atrae el someterme a mujeres de ese perfil. Como esto va de orientación sexual (al menos para mí, vaya) para querer someterme a una mujer primero de todo me tiene que gustar esa mujer, me tiene que atraer de algún modo. Virtudes como la cordialidad, el buen temperamento, la bondad y el sentido del humor son para mí los principales activos de una mujer (sin entrar en el físico). Esas virtudes son las que me atraen (además de otras, como por ejemplo inteligencia etc). Como digo, como la sumisión yo la contemplo desde un punto de vista sexual (entiendo que todos, pero a saber), si me atrae una mujer eso significa que me gustaría someterme a ella y que ella me sometiera. Si no me atrae, la verdad es que no tengo ganas de ello.
No sé… a mi me gustan las mujeres de carne y hueso, con sus problemas, con sus días mejores y peores… las mujeres reales, vaya, no las de cartón piedra hechas a imagen y semejanza de las fantasías sexuales de gente que tiene una pedrada en la cabeza (perdón).
Evidentemente todos tenemos fantasías sexuales, y en esas fantasías a veces nos abandonamos a ciertos clichés, pero, mi ideal de mujer a la que someterme, no es a una mujer encabronada, sino justo precisamente lo contrario: una mujer que disfruta siendo como es, y cuando alguien disfruta haciendo algo, no va y pone cara de resentida con el mundo.
Del mismo modo, el sumiso no es alguien temeroso, cabizbajo, en constante agonía y llorando todo el tiempo por las esquinas (bueno, a veces sí, pero claro… es lo que tiene, lo del dolor, jeje), sino alguien que disfruta plenamente de esos momentos y de esa relación.
Vamos, que más naturalidad y menos pose!
Saludos
blanco
Ese tópico está muy motivado por una fantasía masculina extendida por todos lados. Especialmente en una época en la que se empieza a visibilizar a la mujer dominante y, aparte de la imagen de maestra sádica, se la dibuja como mujer icónica sin piedad y sin empatía. A muchos esa imagen es la que les mueve. A muchos otros, especialmente ahora, entre los más jóvenes, estas imágenes las reconocen como fantasía pero no como deseo real que les mueva a buscarlas. Cambios de estereotipos. Lógico
Gracias por tu siempre interesante comentario, blanco