Conversando con un sumiso, le invité a que me escribiera cómo se sentía él en este momento con su sumisión. Creo que poner de manifiesto distintas formas de sentir y entender la sumisión puede, sin lugar a dudas, enriquecer el blog puesto que mi vocación está en ayudar en la Dominación Femenina tanto a Amas como a sumisos. De ahí que intente darle voz a ellos, a los que deseen comunicarse conmigo y tengan algo interesante que decir.
Aquí les dejo una forma tan válida como cualquier otra de sentir la sumisión y que nos sirve para alejarnos de una única y sesgada imagen estereotipada del sumiso rastrero y cutre de las redes. Quiero mostrarles a personas que dudan, que se cuestionan, que se plantean qué es ser sumiso y qué les mueve, desde la honestidad e, incluso, desde la confusión.
Gracias por compartir conmigo estos pensamientos y gracias por el deseo de ser leído.
Un excelente post. Reflexivo, coherente, racional. Un buen mensaje para los sumisos y Amas que valoran la racionalidad de nuestra condición. Bufón.
Gracias
Muy buenos días. Como sumiso me parece muy interesante esta entrada.
Comentar que la imagen que se tiene de un hombre sumiso es la de una persona carente de personalidad, sin decisión, “juanlanas”, etc. todo en términos despectivos. Sin embargo quiero decir que ésta está alejada de la realidad, al menos de mi realidad.
Soy hombre sumiso, en propiedad de mi Ama y me considero una persona normal, con mi carácter, mi personalidad, con opinión y decisión. El hecho de ser sumiso y estar entregado a mi Ama no me hace ser menos hombre, al contrario, me considero muy afortunado al poder vivir junto a mi Ama la vida que a ambos nos llena y nos complace, cuestión que no todo el mundo puede afirmar de esta manera tan categórica.
Como sumiso tengo mis momentos de reflexión, de pensar como avanzar en mi condición y como tal vivo para hacer de la vida de mi Ama algo libre de preocupaciones procurando que todo le sea un “lecho de rosas”, siempre de acuerdo a sus deseos y gustos. No por ello mi vida está vacía, sino todo lo contrario. Mi vida está llena de felicidad cuando Ella lo es, mis necesidades están totalmente cubiertas con mi entrega y mi servicio a Ella.
Decir también que a la condición de sumiso no se llega de la noche a la mañana. Primeramente uno ha de ser muy consciente de su condición, ha de conocer sus objetivos, sus gustos, sus deseos y limitaciones, para después aspirar a serlo y como no, encontrar a esa mujer a la que entregarse y ser aceptado. Entre medio hay muchos momentos, algunos decepcionantes y otros que te ayudan a seguir. Hay que tener muy claro que es un camino a recorrer, a veces en solitario y otras, las menos, en compañía.
Encontrar a esa mujer es algo que no siempre se consigue, pero no hay que desfallecer pues una vez encontrada tu vida da un vuelco de felicidad y goce al poder llevar a cabo todo lo que en tu interior has estado viviendo.
Gracias y un saludo muy cordial
A mí este escrito me parece una auténtica joya. Sincero y honesto. Aborda el tema de nuestros deseos más íntimos y la necesidad que tenemos de satisfacerlos desde una postura reflexiva, racional y casi se podría decir que existencialista. Lejos de los relatos planos y aburridos de una sumisión o Dominación asombrosamente sin fisuras, el autor se pone el casco con linterna para adentrarse en los diferentes sustratos que componen los sentimientos Femdom: desde la superficialidad de las fantasías sexuales hasta el núcleo que las motiva, pasando por los niveles intermedios entre los que se encuentra la dura roca de la realidad. Es en esta capa donde, si hacemos un buen trabajo de campo, podemos encontrar el Santo Grial de cómo mejor encajar nuestra forma de entender la sexualidad (núcleo y superficie) con la realidad del día a día (nivel intermedio).
El autor plantea cuestiones, sin dar respuestas a las mismas, precisamente porque lo hace desde lel realismo, desde la consciencia de la existencia de deseos y de las enormes dificultades a las que hacer frente. Estamos llenos de dudas porque no tenemos respuestas a las mismas.
En esto de la Femdom (la D/s en general, pero dado que el tema del Blog es la Femdom y que es lo que nos reúne aquí precisamente, yo prefiero utilizar ese término concreto) existen contradicciones, y el autor pone el foco en ellas. Desde el BDSM sobre todo se pone énfasis en las normas, pero. como señala el autor del escrito, esto no va de sentimientos y de intuiciones? de sensaciones? Denuncia, y desde mi punto de vista no sin buen criterio y atino, la burocratización de una forma de vivir basada en la pasión de la llama de querer que nos sometan (o dominar en su caso) y vivir conforme a esa realidad buscada que es la negación a renunciar a dicha pasión. Denuncia además que el medio se convierta a menudo en el fin. Normal que se plantee si es sumiso o no. Yo también me lo planteo, cuando en realidad no debería ser yo quien me lo plantease.
Es su escrito, como digo, un ejercicio de honestidad y sinceridad consigo mismo digno de elogio. Lo fácil es escribir desde la comodidad de la superficie, lo difícil es ponerse con el pico y la pala. No es un escrito con una finalidad de dar respuesta, sino de plantear cuestiones, y somos cada uno de nosotros los que debemos buscar la respuesta. Vivimos en un mundo de todo tan precocinado, que la gente busca sitios donde encontrar la respuesta dada a cuestiones tan intimas como la que nos ocupa. La gente deja de ser reflexiva y buscar su propio camino (otra cosa denunciada por el autor, además) para convertirse en seguidores de teorías y dogmas de fe.
Hago mías sus reflexiones y sus palabras, punto por punto y coma por coma (espero que no tenga copyright), que igualmente podría haber escrito yo sino fuese porque por mucho que lo intentase no llegaría a ese nivel de dominio de la narración tan exquisito como muestra.
Todas esas reflexiones, esa consciencia de la existencia de obstáculos que nos dificulta enormemente el poder abrir un camino, hacen que tenga siempre yo, con respeto a mi parte de la sexualidad y cómo debe de ser una relación afectiva, tener siempre un cierto poso de tristeza. Como un paisaje que estuviese eternamente en niebla.
Muchísimas gracias a ambos, al autor por ese maravilloso escrito, y a Sra. ScheherezadeDom por compartirlo. Se dice que el dinero llama al dinero. También podríamos decir que la calidad intelectual llama a la calidad intelectual.
Saludos
blanco
Para muchos la sumisión es difícil, ni sale automáticamente (y si sale también puede llevar a la aparición de la culpa que se digiere regular o no se digiere, directamente) ni se tiene tan claro que vaya a salir. El sentimiento no tiene porqué concretarse en acto, muchos, muchísimos, no pueden o pueden a intervalos en que se lo permiten para luego dejar de hacerlo.
Hay personas que lo llevan mejor otras que ni se plantean llevarlo y otras que van dejándose arrastrar sin la capacidad de reflexión que este sumiso demuestra. El problema es que el exceso de reflexión puede adormecer o asfixiar el sentimiento hasta hacerlo imposible.
No todo el mundo ni quiere ni puede vivirlo, aún siendo sumiso. Es lógico. Lo que me gustaría es que, al menos, aquí puedan leerlo y sentirse acompañados y comprendidos. Sin necesidad de nada más que ser.
Gracias por tu exégesis y tomarte el tiempo de enriquecer el blog.
ScheherezadeDom
Totalmente de acuerdo con Ud. en que el exceso de reflexión puede dar al traste con llevar a término nuestro deseo de vivir tal como necesitamos vivir. Podemos, tal como Ud. bien señala, ahogar nuestras expectativas en el licor de la meditación y de las cavilaciones.
Creo que en cualquier caso hay que ser consciente de que existen dificultades y contradicciones (pueden provocar sentimientos de culpa por ejemplo, como Ud. dice).
Yo desde luego tengo muy claro quién soy. Yo sí estoy dispuesto al salto (el problema llega cuando no hay donde saltar). Precisamente como creo que sí se puede tener una relación Femdom en el contexto de una relación afectiva, como para mí es una realidad potencial y posible, considero que hay que la estrategia a seguir es amoldar la relación Femdom al marco de la realidad (todo lo demás que nos rodea), y no al revés. Yo creo en el Femdom. Decididamente.
Muchísimas gracias por sus valiosas aportaciones y respuestas a las de los demás, consigue que los temas tengan gran interés.
Un cordial saludo
blanco