La Dominatrix encarna el arquetipo de la mujer dominante en el BDSM. Estas Amas profesionales despliegan una gran actividad en redes sociales, manteniendo una imagen inalcanzable y perfecta. Expertas en múltiples fetichismos, potencian su imagen dominadora en cuero, látex y tacones extremos, convirtiéndose en objeto de adoración.

La Dominatrix: Icono de la Mujer Dominante en el BDSM

La mujer Dominante que encarna la mayoría del imaginario de cualquier persona que se adentra en el mundo del BDSM es la Dominatrix. Estas Amas profesionales, algunas de gran prestigio, despliegan una gran actividad en las redes sociales, dan entrevistas, tienen canales en YouTube y escriben libros. Otras, más discretas, gestionan desde sus propias webs o blogs sus actividades.

Alimentando el Imaginario Dominante

Alimentan la imagen arquetípica de mujer dominante y muestran ante los ojos asombrados de los curiosos imágenes de estudio y fotos de sesiones, potenciando el deseo de los hombres y mujeres sumisos que se acercan a sus dominios. Muchas de Ellas hacen gala de una gran inteligencia y sabiduría a la hora de pulsar mediante imágenes y comentarios el deseo de sumisión de los que la contemplan.

La Imagen de la Dominatrix

Suelen ser muy estrictas a la hora de mantener su imagen de mujer inalcanzable, intocable y perfecta, especificando, en la mayoría de los casos, sus prácticas, conocimientos, deseos, límites y subrayando la ausencia en las sesiones de sexo convencional.Hacen gala de múltiples fetichismos, todos con la finalidad de potenciar su imagen dominadora en cuero, látex y tacones extremos, resaltando su imagen de mujer superior, alejada y elevada sobre la mujer corriente y cotidiana. Esto crea una imagen ampliada de la femineidad con mayúsculas: un objeto, que no sujeto, de adoración.

El Paradigma de la Ama por Excelencia

Convertida en el paradigma de la Ama por excelencia, la Dominatrix utiliza su Dominio ante el hombre que la observa extasiado como objeto de culto y adoración, deshumanizándola y elevándolo a la categoría de diosa objetual.

Motivaciones del Sumiso/Cliente

Al sumiso/cliente no le interesa la mujer sino su fantasía de mujer Dominante y paga, si puede, para conseguirla. Dicho pago puede hacer que Ella llegue a ser aún más inaccesible si su economía no le permitiera volver, lo que aumentaría la distancia y la adoración dependiente una vez probado.Si la Dominatrix pasara a ser cotidiana, la dimensión de distancia física y real dejaría paso a la aparición de la mujer real, la mujer persona. Eso a muchos sumisos no les interesa.

Tipos de Sumisos y Sus Fantasías

Los sumisos que buscan sesiones con Ellas suelen hacerlo por satisfacer sus fantasías concretas. Esto incluye:

  • Sumisos casados
  • Sumisos de sesión: aquellos que no desean ningún tipo de compromiso más allá de la entrega puntual acotada entre los márgenes de la hora que pague.
  • Aquellos que no encuentran Amas amateur.
  • Curiosos que, llevados por el morbo, deseen probar con una diosa.

La Profesionalidad de la Dominatrix

Las Dominatrix mantienen gabinetes o mazmorras bien nutridas de instrumentos, mobiliario, juguetes y demás objetos necesarios para sus prácticas. Deben saber controlar muchas técnicas, tener conocimientos de primeros auxilios así como de la higiene de los instrumentos. En el caso de que no sea así, no merece la pena arriesgarse; la salud es lo primero.Artífices de fantasías, despliegan una playlist donde el sumiso/cliente señala sus gustos y sus límites. A partir de ahí, queda en sus manos. Suelen ser muy prudentes y selectivas a la hora de valorar el equilibrio mental de la persona con la que van a trabajar.

La Búsqueda de una Conexión Real

No todos los sumisos buscan profesionales, aunque puedan querer experimentarlo. Muchos buscan una Ama que sienta de forma real para poder entregarse con mayor intensidad. Para eso, necesitan y requieren notar el placer de Ellas. Algunos ven a la Dominatrix demasiado elevada, demasiado objeto: objeto de adoración pero no de su entrega.

8 comentarios en «La Dominatrix o la mujer como objeto»

  1. Me quedo con la mujer Ama. Ya he probado sesionar con una Dominatrix profesional. Sí que se puede superar algún límite y probar alguna práctica deseada pero no se siente dominación por la otra persona. Por desgracia, ésta resultó ser una estafadora, torpe, por cambiar constantemente su rumbo de opiniones, cosa que la delató.

    1. Gracias por tu comentario Manuel. No todas las mujeres que se dicen profesionales son Amas. Una cosa es poder tener instrumentos y conocer técnicas y otra diferente es ser Ama. Una auténtica Dominatrix debe tener esta cualidad para ser buena en su trabajo. El sumiso/cliente debe tener en cuenta también esto. Los fraudes existen por todos lados.

  2. Lo que compartes, aclara algo más la visión de estas prácticas, en las que me he iniciado recientemente con mi pareja. Muchas gracias y me gustaría que escribieses sobre los encuentros en salas BDSM y si has tenido alguna experiencia en estos lugares.

  3. Buenos dias, este tema de las Amas profesionales es algo del cual no participo pero entiendo y respeto de su existencia y de su uso ya que en algunos casos sirven para desarrollar las fantasías y las carencias de muchas personas y digo en algunos casos porque en otros solo son utilizados los clientes para ser «saqueados» económicamente.
    Últimamente se ha visto inundado el mercado de estas pseudo Amas debido a la gran cantidad de libros que se han escrito sobre este tema y que han hecho que de alguna manera se «desmitifiquen» las relaciones BDSM (se iniciaron con las mil y una Sombras de Grey y demás historias surgidas). Es una regla básica de la economía: a mayor demanda surge la gran oferta.
    Pero esto lo único que hace es encasillar a este tipo de relaciones en cuatro conceptos, el látigo, las esposas, la ropa de cuero y látex etc. Pero no se habla nunca de la esencia de las mismas como es la comunicación, los sentimientos que se profesan entre Ama y sumiso, etc.
    Vuelvo, por ultimo a insistir en lo que siempre he manifestado: yo necesito que exista una RELACIÓN completa entre ambos, de lo contrario es meramente un desahogo puntual que tras él y al volver a la realidad uno se siente vacío.
    Mi amada Ama es una mujer a la que admiro, a la que amo en niveles muy superiores a como se ama en las relaciones tradicionales, es el centro de de mi vida día a día y con la que me siento totalmente unido y amado. Gracias.

    1. Los motivos por los que los sumisos recurren a las profesionales son variados y, en ocasiones, complejos. Merecen mi respeto. Al igual que existen Dóminas Profesionales que también me lo merecen por su responsabilidad ante lo que hacen.
      Es cierto que hay muchas mujeres que se han subido al carro de la Dominación de pago porque puede parecer dinero fácil, aprenden cuatro técnicas, especialmente la humillación excesiva, y ya se sienten Dóminas. Algunos hombres que llegan a estas mujeres generan secuelas psicológicas con posterioridad. Puesto que somos adultos considero que cada uno es libre de hacer lo que le plazca.
      No todos tienen la fortuna de poder vivir lo que tú vives junto a tu Ama. Muchos se desesperan y a otros el tema de las profesionales les va.
      Un saludo y gracias por tu comentario

  4. Hola.. Soy mujer y dominante, el tema de las dominatrix es contradictorio y delicado. No las critico porque hay quien prefiera pagar, y tendran sus motivos. Aunque creo que la dominacion que ejercen es ficticia, el cliente decide las practicas y ella se lo hace, y el solo piensa en su placer, el va a lo que va, el cliente medio que domina desde abajo, al final ella es la que le esta sirviendo. Pero eso es lo que buscan los clientes, no buscan dominacion real. El va por la sesion y ella por el dinero, y ya esta. Luego hay quien prefiera la dominacion real y que exija mayor entrega, asi que una dominatrix no le llena. La mayoria de los hombres solo buscan dominacion sexual, es dificil encontrar sumisos que se entregan totalmente.. Hay muchas que son estafas, asi como en cualquier profesion hay, pero es question de gustos..

    1. Cierto. Igual que hay buenas profesionales que a pesar de los acuerdos Ellas deciden lo que hacen con el cliente en cada sesión, las habrá que sean una estafa como tú dices. Tampoco entre las que son amateur es que haya garantías de Dominación real, según las experiencias contadas por sumisos. Por tanto sólo queda conocerse despacio para poder valorar en qué manos se cae y conocerse lleva un tiempo que no todos están dispuestos a asumir. Un saludo y gracias por tu comentario

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *